Hay dos maneras de configurar el correo en Outlook, Mail o en cualquier otro lector de correo: POP o IMAP.
Al añadir la cuenta, todos los programas de correo te dejan elegir una de estas dos modalidades. Pero… ¿cuál es la que más te conviene?
Buzón POP
Si lo configuras como POP, cuando Outlook consulte si hay correo, lo que hará es preguntar al servidor ¿hay correo? y si lo hay lo descargará y lo borrará del servidor. Si accedes con otro programa de correo, móvil o webmail, no tendrás ahí esos mensajes.
Es posible configurar una opción para no eliminar los mensajes del servidor, pero no es recomendable. Si tienes emails con adjuntos grandes, tu programa los va a descargar de cada vez, consumiendo ancho de banda, para luego no borrarlos.
Si quieres leer tus emails desde varios dispositivos, te interesa más la otra opción…
Buzón IMAP
Si configuras la cuenta como IMAP, los mensajes se almacenan en el servidor, en lugar de descargarse. La cuenta de correo en Outlook estará exactamente igual que en el servidor. Vas a tener en los dos sitios los mismos emails, las mismas carpetas, y vas a borrar los misos mensajes, incluso si configuras la cuenta en varios equipos o móviles.
¿Qué es mejor?
IMAP es mejor. Es un protocolo de correo más moderno que POP, y presenta ventajas interesantes:
- Si se te rompe el ordenador o lo pierdes, o cambias de programa de correo electrónico, al configurar de nuevo tu cuenta de correo, la encontrarás exactamente como estaba.
- Si usas varios dispositivos, tendrás todo sincronizado. Y los vas a usar: más o menos todo el mundo lleva el correo en el móvil y en el ordenador. Si borras un correo que no te interesa en el móvil, ya no tendrás que volver a leerlo y borrarlo en el ordenador.
Solo tiene una pega: Efectivamente, lo que ves en tu lector de correo, es lo que hay en el servidor. Es decir, está ahí, y ocupa sitio. Tienes que tener cuidado con el tamaño de tu cuenta de correo, porque podrías superar su límite.
Nuestros planes de cuentas de correo y hosting tienen como mínimo 10 GB de espacio, así que vas a tardar muchísimo en llenarlo, pero puede ocurrir.
Solo tienes que ser un poco ordenado. No guardes archivos adjuntos grandes en el correo si los puedes guardar en tu disco duro, y acuérdate de vaciar la papelera, porque lo que hay ahí, también ocupa sitio. Lo mismo sucede con el buzón de correos enviados: si mandas un archivo grande, acuérdate de borrarlo después.
Y si quieres archivar grandes cantidades de correo, hay muchísimas soluciones para almacenarlo en tu ordenador y liberar espacio en el servidor.
Cambiar de POP a IMAP
Si hasta ahora estabas usando POP, puedes cambiar la configuración a IMAP sin problemas, directamente en tu programa de correo. Cámbiate y ¡bienvenido al futuro!